En las profesiones de la salud se reconoce , cada día más, las habilidades necesarias de comunicación puesto que el destinatario de los servicios tiene un mayor protagonismo en la mejora o eventual empeoramiento de su salud.
Por ello la práctica reflexiva basada en la observación de la interacción en la consulta médica, de enfermeria o de cualquier otra especialidad de la atención sanitaria tiene un valor precioso para la mejora de la eficacia i eficiencia de las conversaciones profesionales.